LA MUERTE Y YO

Ayer vino la muerte a visitarme. Fue un encuentro fugaz. De cortesía. Me pilló de sorpresa . Yo creía que la Parca querría a mí llevarme. Pero no. Sólo quiso saludarme y decir que pasase un feliz día. Que no me preocupase. Tiempo habría, pasados unos años, de buscarme. Tomamos un café, también charlamos de lo Humano y lo Divino de la vida. Del amor… la esperanza… de la suerte… Para otra cita no, ya no quedamos. Nos dimos dos besos de despedida ya hasta el mismo momento de mi muerte. Jesús Angel Bordonaba.