
ARBOL DE CIUDAD Afligido ornamento de diseño que adherido al asfalto en tus raíces anegas de agonía y cicatrices la ilusión peregrina de tu sueño. Mástil de ambigüedad, mugriento leño que tiznado en miseria te desdices y acotado en exiguo hortal maldices la ficticia locura de tu empeño. Anhelas que tu rama arrope el trino del pájaro cantor y que tus hojas tapicen de luz verde tu quimera. Y asumes como tuyo el cruel destino esperando –y mientras, te deshojas- tu nuevo resurgir de primavera. Jesús Angel Bordonaba